No persigo quimeras, ya no creo en la gente que sonríe, prefiero la que ríe a carcajadas. Prefiero tanques de oxígeno, antes que tanques de guerra. Prefiero una respuesta real, antes que una mentira blanca. Es más, no creo que existan de ese tipo. Las mentiras blancas, mal llamadas piadosas, son mentiras igual y a la larga...dañan.
No creo en la eternidad de las cosas, sólo en la magia del momento. Creo en la fidelidad como una opción de vida, que cierra puertas, pero no lastima. Creo que la inocencia se fue junto con descubrir que el Viejo Pascuero no existe. Pero qué mágico era, cuando esperabamos que llegara dando vueltas en la cama, con cada ruido extraño que semejaba un paso, eso maravilloso que no vuelve... ¿Por qué no vuelve?... fácil, porque ya no somos los mismos.
No creo en la gente que piensa que una marca la hace diferente. Publicidad sólo eso... aunque siempre me ha gustado la calidad, que no implica en pagar 3 veces por algo que tiene un cocodrilo.
Aún así, las uso, y no es que predique y no practique, es sólo porque han sido regalos...o estimo a quién me la obsequió.
Todo me dura años, a veces me aburro de las cosas, porque soy un poco tincada y cuando algo me gusta lo uso hasta acabarlo. ¿Desordenada? Quizás un poco.... como todo el mundo, aunque trato de no presionar la pasta dental arriba, sino siempre desde abajo.
Escribo siempre, cuando estoy en mi pieza, en el auto, en el bus, durante un largo viaje, no tengo un lugar específico, aunque los entendidos dicen que debería tenerlo. Pero escribo por gusto, me maravilla la capacidad de algunos para expresar lo que sienten, proyectarlas en el papel, ya sea con escritos o trazos de un pincel. Me gusta leer, me apasiona el teatro y la música que envuelve, aunque en mi primer mp3, mi primo sólo me grabó reggetón, no porque me guste, con lo romántica que soy... es obvio que prefiero algo más lento...pero era lo único que él tenía y fui yo quien le pidió que me grabara su música, sin conocerla...
Buscando mi identidad no me perdí los recitales de Congreso, Inti-illimani, Illapu, Quilapayún, Silvio Rodríguez y otros... aunque me hubiese encantado estar en uno de Mercedes Sosa. Pero ya es tarde, no está con nosotros. Cuando era más niña me encantaba Madonna, Michael Jackson, Soda Stéreo, por eso siento tanto que Gus (Cerati) esté mal aún.
Hoy prefiero escuchar música en inglés, algo de Nora Jones, Bono, Coldplay... no es que me crea gringa o que el yanquismo o anglicismo se haya apoderado de mí. Sino que al estar tomando clases de inglés, me facilita la pronunciación... sólo eso.
El día a día lo vivo intensamente, entre mi trabajo y mis clases, las salidas con mis amigas, porque pese a algunas decepciones, las tengo. Y aunque no soy muy asidua a salir de noche, me gusta salir a comer o a tomar algo rico. Entre lo dulce y salado, me fascina lo dulce, siendo la torta amor mi favorita. Lo salado, para el almuerzo y la cena. En realidad, no como mucho ahora, he bajado bastante post terremoto, no sé si producto del estrés o de situaciones que me llevaron al descenso.
Quise hacer un post sobre mí, en realidad hace tiempo que no hablo de mí, tal vez a nadie le importe, pero lo quiero tomar como un desahogo... soy lo que soy... y lo que quiero ser.
He vivido lo suficiente para irme tranquila cuando llegue la hora, después de todo conocí el amor, la alegría y el dolor de un adiós. No estoy triste, aunque quizás hoy debería estarlo... los motivos sólo yo los entiendo. Pero no estoy triste, es más, siento que el sol en mi cielo, hoy brilla mucho más y me otorga cierta calidez.
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